IU de Azuqueca se suma a la celebración del Día Internacional contra la Violencia de Género en un momento en el que la crisis, los recortes crueles del PP, los integrismos y el rebrote de actitudes machistas entre los más jóvenes, nos llevan a una situación muy preocupante.

 

La crisis obliga a las parejas a vivir juntas cuando la convivencia está rota, incluso en situaciones de maltrato y de violencia física. Un desempleo insostenible y la falta de oportunidades refuerzan el sometimiento de la parte más débil. Los integrismos, que tienen fijación contra la mujer, no cejan en su avance, en la oscuridad, paso a paso, alentados por algunos acólitos del gobierno que deben obediencia al capelo cardenalicio. Los recortes en servicios sociales dan el tiro de gracia, ahora que la mujer maltratada precisa más amparo que nunca. Para completar el escenario, programas de televisión que son infamia concentrada, difunden estereotipos, incluso en horario protegido, en los que la mujer es un llavero vistoso que cuelga de la trabilla del pantalón de un bruto.
No sólo sufre la mujer con la violencia que se le aplica. También los hijos, que quedan con secuelas de por vida, incapaces de comprender porqué su padre maltrataba a su madre.
Es intolerable que mientras aumentan los casos de violencia contra la mujer, Cospedal, que es una mujer, le haya quitado a la Casa de Acogida de Azuqueca de Henares el 25% de un presupuesto ya muy ajustado, y al Centro de la Mujer otro 11%, con el resultado de una trabajadora que se fue a la calle y una atención mermada. Además, planean sobre ambas responsabilidades, de titularidad regional, el posible cierre o una gestión privada de risa a tarifas de derribo. En este asunto, la señora Cospedal produce dolor, haciendo gala a su nombre, a mujeres inocentes que sólo piden una oportunidad.